No hay prueba cierta de la existencia de Homero, a quien se le atribuye ser autor de La Odisea. Para algunos fue un poeta griego ciego, autor además de La Ilíada – e incluso de otras obras – y para otros no es más que el producto de una leyenda. La Odisea, en todo caso se transmitió primero oralmente durante algunos siglos, hasta que fue escrita hacia el siglo IX a.d.C. en los poblados que tenía Grecia en la costa occidental de Asia Menor, actual Turquía asiática. Otros estudiosos piensan que sus cantos fueron completados en el siglo VII a.d.C. a partir de poemas que solo narraban partes de la obra que conocemos hoy.
La presente versión de La Odisea – cuidadosamente transcrita por Manuel Rojas, Premio Nacional de Literatura – cuenta el regreso a casa del héroe griego Ulises al término de la guerra de Troya. Ulises tarda 20 años en regresar a Ítaca, donde era rey. La obra narra sus múltiples aventuras durante ese período, en el cual, y paralelamente su esposa Penélope y su hijo Telémaco deben tolerar en su palacio a los pretendientes que desean desposarla. Gracias a su astucia , y a la ayuda de la diosa Palas Atenea, Ulises logra superar los muchos obstáculos que encuentra en su largo peregrinaje. Obstáculos puestos no sólo por los hombres sino también por algunos ce los dioses de la rica mitología griega.