Una metáfora ácida, negra e implacable sobre las relaciones conflictivas que los intelectuales latinoamericanos mantienen con la cultura norteamericana. Una lúcida reflexión sobre la condición de la mujer, el lugar de la literatura, las nuevas tecnologías y la obsesión por el prestigio.
Gustavo Zuleta, un profesor de literatura chilena, acepta una oferta para trabajar en una universidad del medio este norteamericano. Mientras espera a su mujer y su hijo recién nacido, Zuleta descubre los contrastes exasperados de la vida académica.