Lou es una adolescente superdotada. Le gusta observar a la gente y coleccionar palabras. Es tímida y está muy sola. Vive con una madre depresiva y un padre que se evade de la realidad como puede. En el colegio, sus compañeros la tienen por una marciana. Un día tiene que preparar un trabajo para exponerlo en clase y se agobia, porque detesta hablar en público. Entonces conoce a No. No es una chica algo mayor que ella que vive en la calle, bebe vodka, se alimenta en comedores sociales y, cuando hay suerte, duerme en centros de acogida. Enseguida se establece entre las dos una conexión especial, una amistad que se verá sometida a duras pruebas y llevada al límite…
Delphine de Vigan nos presenta a dos personajes inolvidables en esta novela que muestra realidades duras –la soledad de quien no encaja o la vida en la calle de quien ha perdido el rumbo– a la vez que transmite los sueños de la pubertad.
«El arte de decir cosas profundas con ligereza» (Emmanuelle de Boysson, Marie Claire).